La Sombra del Viento- Carlos Ruiz Zafón ... Parte V

Me vi entonces a mí mismo a través de sus ojos; apenas un muchacho transparente que creía haber ganado el mundo en una hora y que todavía no sabía que podía perderlo en un minuto.

Fermín traía su entusiasmo insufrible de lunes tempranero.

“No me sea hermético, que lo que no me cuente le saldrá en forma de granos de pus.” (Fermín)

Supuse que tarde o temprano tendría que desvelar parte de todo aquel embrollo a mi padre; qué parte exactamente, era harina de otro costal.

 

“Las verdades de la vida no conocen edad.” (Fermín)

“La madre naturaleza es una grandísima furcia, ésa es la triste realidad.” (Fermín)

“La verdad sólo se dice como último recurso, Daniel, y más a una monja. Antes agotemos los cartuchos.” (Fermín)

“Pierde usted el tiempo, joven. Juanito sólo sabe tirarse pedos y ésos lo único que saben es reírselos y aspirarlos. Como ve, aquí la estructura social no es muy diferente a la del mundo exterior."

“El mundo cambia, pero nunca en lo esencial."

 

Jacinta: “Me acuerdo del día que Penélope me dijo que se iba a casar con Julián. Fue el día que le vio por primera vez. Tenía 13 años y no sabía quién era ni cómo se llamaba.”

Daniel: “¿Cómo sabía entonces que se iba a casar con él?”

Jacinta: “Porque lo había visto. En sueños.”

Quien quiere de verdad quiere en silencio, con hechos y nunca con palabras.

Nadie se había dado cuenta, nadie había prestado atención, pero como siempre, lo esencial de la cuestión había sido decidido antes de que empezase la historia y, para entonces, ya era tarde.

Se besaban con la intensidad de quien se pertenece, ajenos al mundo.

Miquel: “Escribe”

Julián: “Tan pronto llegue te escribiré”

Miquel: “No. A mí no. Escribe libros. No cartas. Escríbelos por mí. Por Penélope.”

“Conserva tus sueños. Nunca sabes cuándo te van a hacer falta.” (Miquel Moliner)